Existen algunas nubes extrañas y caprichosas, incluso intimidatorias,
con infinitos bultos que se forman debido al choque de fuertes
corrientes verticales descendentes. Son las formaciones del tipo
mammatus.
Pero no son nubes
en sí mismas y pueden formarse a partir de varios tipos de nubes
como cirros, cúmulos, estratos, también estratocúmulus y
especialmente a partir de cumulonimbus, siempre que exista una
corriente descendente que aplaste la nube contra su ascensión
natural de formación. El resultado es una superficie inferior de la
nube con bultos o “mamas” que dan el nombre a tan curioso fenómeno
atmosférico.
Los cumulonimbus
con forma de yunque son los que generan los mammatus más
espectaculares, colgantes desde la base de la nube con bultos
espectaculares.
¿Cómo se forman los
mammatus?
El origen más
clásico es de tipo convectivo. Todas las nubes se forman cuando el
aire caliente y por tanto menos denso que el frío de alrededor, sube
cual burbuja de aire en el agua. El aire caliente cargado de vapor
de agua se condensa formando micro-gotitas que a su vez entregan
energía calorífica al medio que la rodea debido al calor de
condensación que hace que la masa tienda aún más a continuar la
ascensión. El calor cedido durante la condensación es justamente el
mismo que el sol tuvo que aplicar para conseguir evaporar esa misma
gotita (calor latente de evaporación). El fenómeno exotérmico es
brutal y hace que los chorros de aire ascendente puedan alcanzar
velocidades de más de cien kilómetros por hora y subir hasta la
troposfera a más de 15 kilómetros de altura. Si a 5 ó 10 kilómetros
de altura existen fuertes vientos horizontales, se crea una capa de
nubes que se extiende hasta alcanzar los chorros de aire frió que
descienden alrededor de la formación de la nube lo cual da como
resultado la típica forma de yunque de los cumulonímbus.
Las Mammatus son tan poco comunes como espectaculares. Se producen a
veces tras la formación de intensos fenómenos atmosféricos, por
ejemplo bajo la base de un cumulonimbus, y aunque intimidan son
inofensivas.
La parte de la
nube que forma el yunque puede ser muy grande en proporción con la
zona de ascendencia que forma el fenómeno. En la parte convectiva de
la fase de disipación es donde pueden darse la formación de estas
protuberancias o mamas. En las zonas que se encuentran alejadas de
las fuertes corrientes ascendentes, el aire saturado de humedad
comienza a descender junto con los micro-cristales que lleva esa
masa de aire.
Al descender la
temperatura aumenta y funde los cristalitos de hielo lo cual absorbe
calor al medio, con lo cual se modera el aumento de temperatura
debido a la pérdida de altura de la masa de aire. Cada protuberancia
indica uno de estos descensos de aire en la base de la nube. El aire
justo debajo de la base de la nube tiene tendencia a subir por estar
más caliente que la base de la nube, y “sujeta” la nube impidiéndola
bajar. Este “colchón” bajo la nube aprovecha cualquier hueco para
empujar entre cada protuberancia descendente, acrecentando el efecto
hasta alcanzar las características formas granulosas.
La presencia de
estas protuberancias no presagian lluvias u otros cambios drásticos
en la meteorología como falsamente se cree. Sin embargo el fenómeno
es muy atractivo y espectacular al atardecer, cuando el sol
enrojecido ilumina y contrasta las curvaturas de cada bulto
algodonoso.
Artículos relacionados:
-
El color de las nubes
|